Lo que no te mata te hace más fuerte: El regreso de Lisbeth Salander

Share on FacebookTweet about this on TwitterShare on Google+Pin on PinterestShare on TumblrShare on LinkedInEmail this to someone

neriPor: Alejandro Ortega Neri

Cuando se terminé de leer La reina en el palacio de las corrientes de aire, la última entrega de la saga Millennium escrita por el fallecido Stieg Larsson llegó la sensación de vacío, de saber que jamás Lisbeth Salander y Mikael Blomkvist protagonizarían otras historias. Sin embargo la desazón terminó el pasado 27 de agosto cuando a nivel mundial se lanzó a la venta una nueva historia ahora a manos del sueco David Lagercrantz.

Como era de esperarse, la noticia en la fanaticada causó una doble impresión. Por un lado el regocijo de volver a encontrarse entre las páginas con esa hacker entrañable, pero por el otro la desconfianza que provocaba que un escritor ajeno se hiciera cargo de la continuación de la saga que ha vendido más de 75 millones de ejemplares en todo el mundo, y más si entre sus antecedentes su relación con la novela policiaca es nula.

Aun así los herederos de Larsson confiaron en Lagercrantz para que se hiciera cargo de Blomkvist y Salander en la nueva historia que lleva por título Lo que no te mata te hace más fuerte (Destino 2015).

La historia de esta entrega gira en torno a conspiraciones mundiales a través de la tecnología, algo parecido al caso Wikileaks. Lisbeth Salander ha salido de caza y es partícipe de un atentado hacker de graves consecuencias. Mientras que Blomkvist lucha en la redacción de Millennium con los nuevos propietarios de la revista que buscan darle un nuevo enfoque comercial, allende a que vive unos días de estancamiento como periodista de investigación.

El detonante de la historia sucederá una fría madrugada cuando Mikael reciba la llamada de Frans Balder, un académico sueco experto en Inteligencia Artificial quien afirma tener en su poder información importante sobre los servicios de inteligencia y defensa de Estados Unidos, los cuales han sido obtenidos por una hacker quien hace que Blomkvist esboce una ligera sonrisa.

Así pues la historia está llena de conspiraciones, de hackers, de agentes infiltrados, de tráfico ilegal de información clasificada, de mentiras, de violencia. Salander y Blomkvist saldrán nuevamente a la casa. La primera, de información y de hombres que no aman a las mujeres, el segundo de una historia que lo ponga nuevamente en contacto con Salander pero también en el peldaño más alto del periodismo de investigación.

Aparecen en esta entrega nuevos personajes que tendrán un papel fundamental en la trama. Pero también Lagercrantz trae a la historia a esos de las historias pasadas que siguen siendo parte importante, como el inspector Bublanski, la asistente Sonja Modig, el tutor de Lisbeth Holger Palmgren. Sin embargo quizá la aparición más interesante en esta novela sea la de August Balder, un niño autista que será una pieza fundamental en el transcurso de la trama. Pero también la aparición de la hermana gemela de Lisbeth Salander torcerá la historia.

La novela tiene una estructura narrativa similar a una película en la que cada fragmento de la historia es narrada desde la perspectiva de los personajes participantes. En un primer momento la fórmula es atractiva pero después de que se repite en varias ocasiones deja de serlo. Incluso si se contará de una manera normal, la editorial y el escritor se hubieran ahorrado unas 200 páginas tal vez.

Y a pesar de que Lagercrantz no tiene, según su historial, experiencia en novela policiaca no lo hace tan mal. Se nota un buen trato e investigación en la parte informativa de las nuevas tecnologías, de las matemáticas y de las enfermedades como el autismo. Sin embargo algunas partes de la historia resultan previsibles, es fácil saber en qué terminarán ciertos asuntos. Es quizá ahí donde más se observa su novatez en el género.

Pero no por esto decepciona. Si los fans de la saga quieren imaginar a Lisbeth Salander pateándole el culo a los hombres que no aman a las mujeres, en la historia la encontrarán. Si la quieren saber en acción protegiendo a los buenos a pesar de arriesgar su vida, en la novela la encontrarán. Si la quieren ver a máxima velocidad, disparando, haciéndola de heroína punk siempre anónima, ahí está esa Salander que a todos nos encanta. Por su parte Blomkvist sigue ahí, al pie del cañón, protegiendo a toda costa a esa mujer rara que le roba sonrisas.

Stieg Larsson tenía pensadas siete historias para completar la saga, sin embargo su temprana muerte lo impidió. Sin embargo por como finaliza esta entrega se infiere que habrá más. No sabemos si será Lagercrantz quien la continué, pues todo está en manos de los herederos, lo que sí es que Suecia se caracteriza por ser un semillero de buenos escritores de novela policiaca, sería bueno el ejercicio experimental de ahora pasarle el timón a otro escritor, con la idea de que Salander y Blomkvist sigan poblando nuestros sueños y los insomnios. Para los fans de la saga es obligatorio leerla.

 

 

 

Deja un comentario